Estaba frente al PC. Retocando el pasquín cuya edición me dejará nada satisfecho, sé que lo mandaré, porque no se puede quedar encerrado de por vida en mi disco duro. Llevo 3 meses diciendo lo mismo y las protestas están a la orden del día.
Mientras sonaba “Hail to the thief”, en la última canción del disco, por cierto que me ha regalado Ric.- hace tiempo atrás, con muchos extras de mi delicia. Creo que Ric.- está pasado de nostalgia, pero aún así suponemos que está bien , allá lejos, viendo cosas quenosotros no, puesla ciudad se nos quedó chica y nos parece repetida. Es terriblemente cierto eso de añorar cuando no se tiene. En fin.
Mientras sonaba “Hail to the thief”, en la última canción del disco, por cierto que me ha regalado Ric.- hace tiempo atrás, con muchos extras de mi delicia. Creo que Ric.- está pasado de nostalgia, pero aún así suponemos que está bien , allá lejos, viendo cosas quenosotros no, puesla ciudad se nos quedó chica y nos parece repetida. Es terriblemente cierto eso de añorar cuando no se tiene. En fin.
Y me quedé pegado mirando a la pantalla. Gemstonematrix me di cuenta que se llama esa visualización que me saca de mis casillas del WMP (Windows Media Player). ¿A alguien le importará que un tarado como yo se quede embelesado mirando una pantalla de calugas en movimiento?
Calugas que me recuerdan al metro y sus estaciones más viejas (esas de la línea 2 y algunas de la línea 1 que conservan esos decorados), a una disco de noche, a la onda disco, a todo cuanto me he quedado oyendo hipnotizado por esos cuadros sicóticos que prenden y apagan cada vez más informes a medida que se aleja el reflejo del centro de la pantalla.
No me dejan estudiar, me hacen cambiar el track que oigo y así me he paseado por el mencionado de Radiohead completo, unas cosas de Mogwai, algo de ATR, y Faith no More. Para completar mi ensalada hipnótica agregamos algo de Satyricon (siempre me pregunto aun que hace una banda así entre mis favoritas) y de Wagner para condimentar dramatismo al asunto, no sin el nexo Therion.
Lo bueno de todo es que así atontado de música, y no con la caja esa, pienso menos. Me distraigo, pierdo una mañana completa en pijama y sin bañarme, pero desayunado (porque es lo más importante), sin haber estudiado nada de mi próximo examen y el subsiguiente. Ese subsiguiente que estoy a punto de reprobar, pagando la mediocridad de mi semestre académico. El próximo es fácil. Quizás por eso aún no me preocupo. Quizás por eso prefiero la hipnosis conciente de la Gemstonematrix mientras el ‘wufer’ se funde en melodías de ensueño, mientras afuera el sol castiga, yo aquí dentro, protegido, sin calor y embriagado de coca cola.
Pero es mentira que no pienso. De hecho es porque comienzo a hacerlo que me escapo. Ya pasé días horrendos en que todo era meticulosamente dicho, pensado, en función de la persona y los objetivos para con ella, en función de lo que quería alcanzar. Resulta, casi siempre, pero es un ejercicio agotador que terminó por hacerme odiar a todos aquellos filosofistas (no filósofos) que se revolcaban en frases dichas, pensamientos escritos y teorías añejas. ¿Acaso no las aprendimos también? ¡Y diablos de qué sirven!
Hoy me estorban. Sólo quiero vivir, sólo quiero dejar de pensar en mi responsabilidad para el mundo que algunos me achacan. Sé que cosas debo hacer, que responsabilidades asumí, pero hace unos meses no me importan.
¿Acaso no notan que pido tan poco? Y ese tan poco por la mierda que cuesta tanto. ¿A quién le sirve ser abogado ¡por dios!? Yo no quiero serlo, solo quiero un poco de tranquilidad que se malentiende desde los bolsillos. Quisiera haber sido cualquier otra cosa. Mi hermana seguramente ganara el quinto de lo que yo gane, es una amargada endémica pero estará feliz con lo que hace. En cambio soy un ser estúpidamente feliz, que no tiene de que, sólo la actitud y para más frustrado.
Ayer le dije cosas a alguien que quizás no debí decir. Sólo mías, de cómo me siento y como miro hacia mañana. Claro que no quisiera mirar solo, con ese prontuario de mutilación afectiva que tengo, es lo menos que necesito. Quizás fue como un llamado de atención, me sentí un tanto patético. Hay intereses creados, quizás fue algo sucio de mi parte jugar al sentimentalismo, pero no lo creo, porque no tengo la más mínima intención de hacer las cosas mal. Ya fallé demasiado este año y como dije ayer, me queda el cuero de chancho al menos para tratar de enderezar la vida.
Hace rato no miro el Gemstonematrix, si tiene hasta reminiscencia de filme sci-fi o de novela de Dick. Me preocupo de escribir, no importa qué. Las horas pasan y no hay con que quemarlas. Y si hay, no es mi prioridad aplicar esos métodos, estudio... es-tu-dio.
El problema es creer estar en lo correcto y que lo correcto te diga que no, que espérate, que mala suerte y pa’la otra. A pesar de los vítores de todos mis amigos que aplauden cuando decido bien. Pero la decisión no me deja tomarla. Y la decisión es lo correcto. Pero está aproblemada y no tiene disposición para dejarme llevar por ella aunque podría ser lo mejor.
PS1: Vengo de ver “Eternal Sunshine...” por enésima vez. Nunca una película me había desarmado tanto y por eso es posible que escriba lo que escribo, discúlpenme los aludidos, los sombreros se ponen solitos.
PS2: Mientras escribía esto la lista aleatoria hizo sonar “Fearless” (Pink Floyd). ¡Estoy seguro que mi PC algo quiere decirme!, ja!.
Calugas que me recuerdan al metro y sus estaciones más viejas (esas de la línea 2 y algunas de la línea 1 que conservan esos decorados), a una disco de noche, a la onda disco, a todo cuanto me he quedado oyendo hipnotizado por esos cuadros sicóticos que prenden y apagan cada vez más informes a medida que se aleja el reflejo del centro de la pantalla.
No me dejan estudiar, me hacen cambiar el track que oigo y así me he paseado por el mencionado de Radiohead completo, unas cosas de Mogwai, algo de ATR, y Faith no More. Para completar mi ensalada hipnótica agregamos algo de Satyricon (siempre me pregunto aun que hace una banda así entre mis favoritas) y de Wagner para condimentar dramatismo al asunto, no sin el nexo Therion.
Lo bueno de todo es que así atontado de música, y no con la caja esa, pienso menos. Me distraigo, pierdo una mañana completa en pijama y sin bañarme, pero desayunado (porque es lo más importante), sin haber estudiado nada de mi próximo examen y el subsiguiente. Ese subsiguiente que estoy a punto de reprobar, pagando la mediocridad de mi semestre académico. El próximo es fácil. Quizás por eso aún no me preocupo. Quizás por eso prefiero la hipnosis conciente de la Gemstonematrix mientras el ‘wufer’ se funde en melodías de ensueño, mientras afuera el sol castiga, yo aquí dentro, protegido, sin calor y embriagado de coca cola.
Pero es mentira que no pienso. De hecho es porque comienzo a hacerlo que me escapo. Ya pasé días horrendos en que todo era meticulosamente dicho, pensado, en función de la persona y los objetivos para con ella, en función de lo que quería alcanzar. Resulta, casi siempre, pero es un ejercicio agotador que terminó por hacerme odiar a todos aquellos filosofistas (no filósofos) que se revolcaban en frases dichas, pensamientos escritos y teorías añejas. ¿Acaso no las aprendimos también? ¡Y diablos de qué sirven!
Hoy me estorban. Sólo quiero vivir, sólo quiero dejar de pensar en mi responsabilidad para el mundo que algunos me achacan. Sé que cosas debo hacer, que responsabilidades asumí, pero hace unos meses no me importan.
¿Acaso no notan que pido tan poco? Y ese tan poco por la mierda que cuesta tanto. ¿A quién le sirve ser abogado ¡por dios!? Yo no quiero serlo, solo quiero un poco de tranquilidad que se malentiende desde los bolsillos. Quisiera haber sido cualquier otra cosa. Mi hermana seguramente ganara el quinto de lo que yo gane, es una amargada endémica pero estará feliz con lo que hace. En cambio soy un ser estúpidamente feliz, que no tiene de que, sólo la actitud y para más frustrado.
Ayer le dije cosas a alguien que quizás no debí decir. Sólo mías, de cómo me siento y como miro hacia mañana. Claro que no quisiera mirar solo, con ese prontuario de mutilación afectiva que tengo, es lo menos que necesito. Quizás fue como un llamado de atención, me sentí un tanto patético. Hay intereses creados, quizás fue algo sucio de mi parte jugar al sentimentalismo, pero no lo creo, porque no tengo la más mínima intención de hacer las cosas mal. Ya fallé demasiado este año y como dije ayer, me queda el cuero de chancho al menos para tratar de enderezar la vida.
Hace rato no miro el Gemstonematrix, si tiene hasta reminiscencia de filme sci-fi o de novela de Dick. Me preocupo de escribir, no importa qué. Las horas pasan y no hay con que quemarlas. Y si hay, no es mi prioridad aplicar esos métodos, estudio... es-tu-dio.
El problema es creer estar en lo correcto y que lo correcto te diga que no, que espérate, que mala suerte y pa’la otra. A pesar de los vítores de todos mis amigos que aplauden cuando decido bien. Pero la decisión no me deja tomarla. Y la decisión es lo correcto. Pero está aproblemada y no tiene disposición para dejarme llevar por ella aunque podría ser lo mejor.
PS1: Vengo de ver “Eternal Sunshine...” por enésima vez. Nunca una película me había desarmado tanto y por eso es posible que escriba lo que escribo, discúlpenme los aludidos, los sombreros se ponen solitos.
PS2: Mientras escribía esto la lista aleatoria hizo sonar “Fearless” (Pink Floyd). ¡Estoy seguro que mi PC algo quiere decirme!, ja!.