martes, octubre 30

Para entender mejor el día después

Faltaba que el señor Ratzinger dijera algo para que definitivamente nadie entendiera nada y se avocaran todo a oir la voz de la autoridad que dicta que debe ser "objecion de conciencia" la justificación para no querer vender la pastilla del día después.


No dudo de que el señor Ratzinger sea un hombre muy culto y versado en varios temas, pero es siempre la fe la que termina entrometiendose en asuntos que trascienden a ella y por su mala práctica perjudican a otro monton de gente inocente.
Aclaremos conceptos. Es cierto que existe la posibilidad de la objeción de conciencia: a Michel Nash lo asesinaron por ello, los Testigos de Jehová rehusan realizar el servicio militar porque su conciencia les impide cargar armas, entre otras son ejemplos de objeción de conciencia en sentido práctico. En efecto, hoy las constituciones democráticas establecen que cada persona tiene derecho a que le sean respetadas todas y cada una de sus libertades individuales, tanto civiles como políticas. Entre las primeras esta: derecho a la vida, derecho a la nacionalidad, a una igualdad de trato ante la justicia, a la libertad de pensamiento o expresión (la objeción de conciencia se puede incluir acá), al honor y a la intimidad y el derecho de propiedad. Como en lo que se refiere a los derechos políticos: derecho de reunión, de asociación, de participación política, etc.
Ahora bien, todas y cada una de estas libertades tienen límites, impuestos según de que se trate. Así por ejemplo el derecho de propiedad está limitado por la expropiación que tiene su fin en el bien común (un fin más alto que al propiedad, pues el bien común es un fin de la sociedad), el derecho a la libertad de expresión está limitado por los delitos de injurias o el de calumnias, es decir que puedo decir lo que quiera sin comprometer el honor de otra persona gratuitamente. Y tenemos el derecho a la vida, larga discusión que se divide entre los que definen cuando comienza una vida (estos a su vez dependiendo cada uno de donde crea que comienza: en la concepción, la anidación, etc.), y en los que ante todo evento dicen que habrá una espectativa de que haya vida y por lo tanto defienden su curso natural a ultranza.
Ambas posturas son saludables y discutibles, personalmente creo en la anidación para configurar efectivamente una espectativa de vida (un embrion in vitro no tiene espectativas de vida mientras no sea implantado, y muchos cigotos se eliminan espontaneamente por que anidan tardíamente y se eliminan con la menstruación o nunca llegan a anidarse y no por eso hablamos de aborto, sino que son procesos naturales del cuerpo).
Una mujer, debe tener el derecho de decidir en un primer momento si desea embarazarse o no, lo hacen las que toman pastillas, las que tienen DIU, las que toman la píldora del día después(PDD). Y no puede otra persona decidir unilateralmente que así no sea, a menos que hayan normas que lo prohiban expresamente (como el aborto).

Entonces, tenemos que los gerentes de las farmacias objetan a su conciencia para no vender la pastilla, el Papa llama a no ofrecerla. Resulta que hay un país soberano que se llama Chile, el cual se rige por normas positivas que establecen derechos y obligaciones. Entre esos derechos esta el acceso gratuito a la PDD en los consultorios del país y el acceso garantizado en el comercio. Entre las obligaciones esta la de proveerla a quien la requiera en estos centros y la venta en los establecimientos de comercio la cual no puede ser negada.

Por otra parte, el señor Ratzinger al llamar a la objeción de conciencia a quienes tienen el poder de distribuirla, profiere un equivalente a la sedición, pues interviene en la soberanía de las naciones para llamar al incumplimiento de la ley. La ramera una vez más tira las riendas de la bestia salvaje.
En definitiva, si el señor Ratzinger llamara a la objeción de conciencia a cada católico para que no adquiera este producto, es completamente aceptable que cada uno en su libertad de conciencia pueda decidir por si mismo como ejercer su fe y a través de que medio, pero lo otro, el llamar a quienes tienen el poder para dirigir los actos de las personas coartando su libertad no es objeción de conciencia, es manipulación, yo no tengo la fe y no necesito que me salven igual que mucha gente que tiene el mismo conflicto al verse afectada por estos llamados cuando Chile no es un país confesional y declarado laico hace más de un siglo.
Por otro lado, y más importante, hay un fin como les dije al principio que trasciende a los demás por ser este la materialización de la vida en sociedad y el fin de los Estados en su organización para con la sociedad: el bien común. "Las empresas tienen una responsabilidad con ese bien común" en palabras de la señora Barría, Ministra de Salud, y la salud pública es una parte de este bien común por lo que es menester aplicar políticas que eviten la alta tasa de abortos que existen en el país (toda vez que no es concluyente que el Levonorgestrel sea abortivo como alegan quienes lo rechazan), con el consiguiente gasto de recursos para quienes acceden al servicio público de atención por infecciones derivadas, porque abortar es peor por las graves consecuencias físicas que pueden derivar de ello, porque hay mujeres y niñas que no necesitan ser madres producto de violaciones para críar niños concebidos a partir del trauma (con los consiguientes maltratos derivados de la afectación sicológica de ello). El bien común aspira a todo ello, el Papa aspira a tener conejos. El Estado cumple su rol subsidiario al tener la pastilla en consultorios, pero ese rol juega cuando no se quiere ejercer una actividad económica o no se puede, no se restringe a uno o dos productos, por lo que ese argumento esta errado por parte de los geniecillos de Libertad y Desarrollo (era que no!). Burgos lo dice de forma sencilla y tajante: "me llama mucho la atención el cambio de giro de esta empresa, que legítimamente se dedica al lucro, a tutelar los derechos de las personas" Claramente lo último no esta dentro de sus atribuciones.


En conclusión, la objeción de conciencia para este caso no aplica, por involucrar el bien común de la sociedad un principio mucho más elevado e importante, quedando esta relegada al ambito privado de las personas no pudiendo inmiscuirse en las libertades de los otros, que somos todos los demás. Ella recién comienza a operar en el momento que una persona opta o deja de optar por adquirir el producto no siendo facultativo de una empresa restringir su venta bajo ese argumento.


saludos

PS. de algo sirve estudiar esta hueaíta de carrera :D

PS2. todas las citas en El Mercurio de hoy

10 comentarios:

Camiyo dijo...

Los argumentos de las cadenas de farmacias son demasiado ingenuos... es como transportarse a la Edad Media (pero sin las catedrales góticas).

Pretenden que la gente crea que está bien no vender la píldora porque al pobre farmacéutico le generaremos un trauma ético y moral si lo obligamos... cuando todos sabemos que al únicO HOMBRE q le produce conflicto es al dueño de la cadena.

Además si fuera por eso tampoco podrian vendernos preservativos, porque imagínate, un farmacéutico católico vendiendole condones a un gay, lo excomulgan!

Si la cosa fuera tan ridículamente simple, bueno, q el farmacéutico no atienda a esa clientA MUJER y que lo haga su colega, y si no, la farmacia del lado (en Santiago hay farmacias cada dos cuadras) Pero no es así.

Y por suerte existe una ministrA porque si no, sería una discusión de puros hombres hablando sobre embarazo... PLOP!

Saludos!

PS: perdón por lo extenso, pero era para hacerlo proporcional al post (y me lo leí completo eh)

cristian dijo...

¡Eso!
Permitamos enfaticamente que en Chile, toda madre que desee asesinar a su hijo en estado embrionario, tenga todas las posibilidades de hacerlo, sin limitaciones de parte de estupidos defensores de la vida.
No ven que somos un gran pais, adonde no se permite matar a un asesino múltiple ya que somos tan civilizados que no tenemos pena de muerte; salvo para embriones inocentes que a nadie le importan.

Respecto a la famosa pildora del dia después, no está comprobado que no sea abortiva.
Si existen dudas acerca de que un medicamento pueda afectar tu salud o tu vida ¿ autorizarías su venta ?
Más aun si existen alternativas de prevención no abortivas: anticonceptivos orales o condón. Pero frente a un fármaco que puede matar a un ser vivo, más chico y que no grita ni puede defenderse , ahi sí.
Al menos, a los verdaderos defensores de la vida como yo , la sangre de victimas inocentes no salpicará nuestra conciencia.

Anónimo dijo...

Ya que hablamos tanto de libertad individual, incluso para usar medicamentos que (como dice el comemntario previo) pueden matar embriones humanos in utero
¿por qué no defiendes también la libertad a escoger un colegio para los hijos, libertad que la Bachelet pretende limitar con su Ley de Educación?
¿por qué no defiendes la libre elección de medicos y clìnicas, limitada por el plan Auge de la Concertación?

Comparto las opiniones de Cristián que comentó antes , creo que la posición de defender el uso de la pildora y el derecho a la vida son incompatibles. Biológicamente hablando, y para que decir, moralmente hablando.

Carlitos dijo...

señor o señorita flor de lis...
si usted siguiera la lectura atenta del post, notese que fundo mis argumentos en el concepto final de la objecion de conciencia.

Sobre las otras libertades que me atañes no defender, simplemente de digo que no soy un concertacionista, no me defino como tal, y podria largarme en post eternos hablando de muchas coass que estan mal en este pais, por culpa de la concertacion, por culpa del sistema economico y por culpa del a desidia ciudadana. Y ojo que tampoco soy ningun comunista.

Defender el AUGE o la LGE, es una tontera como defender Transantiago, pero son errores menos notorios para el vulgo que parecen pasar piola, como el sistema de estudios de impacto ambiental aplicado por la CONAMA, como los tribunales de familia, como la idea estupida del femicidio como figura delictual nueva en lugar de una agravante del homicidio, como la compra de acciones con informacion privilegiada, como los desfalcos, la esclavizaciòn de inmigrantes y un cuanto hay de cosas que pasan en Chile que no debieran pasar. No eres la unica(o) con capacidad de asombro ni escandalizaciòn por las cosas

Y acerca de tu concepto de moral, dejame decirte que no es ùnico ni verdadero, ni el mejor. Existen muchas apreciaciones distintas y lo que corresponde es hacerlas convivir a todas de igual forma sin superponer "mi moral que es mas buena que la tuya", en tu concepto, a la de los demàs...

saludos
c.

p. dijo...

a mi me parece muy bien el argumento del bien común, sobretodo con un negocio como el de las farmacias, donde deberían surtirte de todo lo que te venga en gana (siempre con las debidas recetas, según sea el caso) y no preguntarte NADA (de nada).

si en algo deben aplicar la conciencia es en no cuestionarte, en simplemente asesorarte, darte toda la información medicamentosa que requieras y ya. un principio ético de ellos debiera ser el acogerte con un trato serio, ser discretos.... cosa que no se da muy seguido y que frena bastante. Hace un tiempo a los jovenes que iban por condones o las jovenes por anticonceptivos o test de embarazo, ahora a las mujeres cuando quieran utilizar la pildora.

creo que a lo que juegan los dueños de estas farmacias no es tanto a que esta pildora sea inaccesible porque no hay, sino incluir la frase "AQUI NO SE VENDE ESA COCHINÁ, ASESINA DE NIÑOS, VAYA A OTRA CLASE DE FARMACIAS" y una mirada de "AH, Y NO TE GUSTÓ..."

buscan inhibir.

es una espantosa manera de imponer los credos y las morales... la iglesia es experta en eso.

qué seco te quedó este post.
los niños pro (no es progre) aman argumentar en ese tono
"matan al inocente y dejan vivir al criminal"
qué clase de moral es esa?

te amoo
(y ellos no pueden hacer nada contra eso, já!)

a-prender dijo...

Primeramente, me sorprende las respuestas con cierto “matiz” violento-moralista-fascistoide de alguno de sus lectores.

Si nos concentramos en el bien común (como fin ultimo), la PDD no debería venderse dado la baja tasa de natalidad, la que acarreara fuertes problemas económicos por la no “sustentabilidad” de una economía con fuerte presencia del adulto mayor.


Estoy absolutamente convencido que debe legislarse sobre las practicas abortivas, si pensamos que en Chile se realizan mas de 150 mil abortos al año, estos deben ser normados para su buena ejecución y no poner en riesgo la vida de la mujer.(esto totalmente al margen, de sí estoy o no de acuerdo, este es un tema de salud pública)

No tapemos el sol con un dedo, como lo hacen ciertos grupos religiosos, con su intransigente e intolerante discurso:

“El Aborto No..el Condón es peor..
pues el SIDA y los hijos son mandados por Dios”....


Salud-os....

Blefaroplastía dijo...

Holas, oye, algunos argumentos que se podrían incorporar a la discusión.

Los medicamentos, en escencia, son bienes privados, y por lo tanto, no recae necesariamente en el estado la función de proveerlos.

Ahora, hay bienes privados cuyo consumo masivo determinan externalidades positivas a la sociedad, y que por lo tanto, al estado le conviene una cobertura amplia de su uso. El caso más evidente es el de algunas vacunas. Por eso son gratuitas en el sector público y el privado, y no se te puede negar el acceso. No es el caso del PDD.

Después, hay un listado de farmacos escenciales, que la OMS, RECOMIENDA, como que los gobiernos debieran poner a disposición de la población y mejorar el acceso. La manera de hacerlo es privativa de cada país y depende claramente de como esté conformado su sistema de salud. En este grupo se encuentra el famoso levonorgestrel (PDD). Sin embargo, la desición de incluirlo a no a nuestro listado nacional, depende de factores epidemiológicos y económicos, dentro de los que se incluyen la pertinencia, la acpetabilidad y la legalidad.

Ahora, el estado se define como subsidiario, lo cual significa, según entiendo, que se hace cargo de aquellas prestaciones mínimas que los privados no puedan o no les interese (por la razón que sea) realizar.

Hasta donde sé, el gobierno no tiene facultades para obligar a un privado, en este caso, farmacia, a vender lo que a este no le paresca. Cada farmacia decidirá esto según su propia estrategia. Sea esta todo lo ridicula e incongruente que en sus declaraciones nos han dejado entrever. La objeción de conciencia es bien poco creible de parte de las farmacias. El argumento de que el embarazo no es una enfermedad, por lo tanto, la anticoncepción de emergencia no es medicina, es casi, irrespetuoso y vulgar. Sobre quien entrega el farmaco, asumamos que no hay un acto de desición ahi, por lo tanto, no hay nada que objetar.

(No sé a que te refieres con acceso garantizado en el comercio. No sé si existe esa figura)

En todo caso,en la medida que el PDD se entregué en los SAPUS (debiera entregarse ahí y no en los consultorios), y estos no rechacen a quien consulta independiente de su previsión(lo que en la práctica se respeta), el rol subsidiario está cubierto. el costo de esta desición es otro tema.

El tema de si es abortivo o no, entiendo está cientificamente resuelto y los argumentos de los otros interesados son más bien circunstanciales o dogmáticos, y contra eso nada puede hacerse.

Creo que eso. Interesante tu pós.

Eso

B.

Remus dijo...

Por principio, prefiero saltarme los post que hacen referencia a Benedicto XVI. Como soy papista, tiendo a ponerme de su parte...
En todo caso, la polémica no la armó él (cuyo deber es defender la vida desde su concepción), sino el medio de comunicación -La Segunda- que aprovechó la coincidencia de su llamado, con la situación que se está dando en Chile.
Y sin se experto en el tema ni estar del todo informado, puedo comentar que el otro día salía una carta de los lectores en que se destacaba que además del fármaco en cuestión, sí existen una multiplicidad de productos cuyo efecto es certificadamente abortivo. Por lo tanto, el llamado hecho por el Papa debía entenderse en ese contexto general y no circunscribirlo al debate local.

Saludos

Blefaroplastía dijo...

Quedé lelo con lo de la responsabilidad congtractual y lo del libre mercado y la constitución, no conocía esos aspectos.

Bien

Eso

B.

Anónimo dijo...

brillante....

brillante tu comentario.

Por culpa de esa objeción de conciencia me tuve que chantar miles de pastillas, una combinación con iguales efectos pero bastante más fuerte, una bomba de hormonas que me hizo sentir bastante mal, porque claro, en la farmacia no había, pese a que tenía receta.

Y claro, yo tenía el dinero para comprárme las pastillitas....

Aún (cosa extraña) me considero católica, y creo en la vida, y creo en mi vida, en mi libertad y que la vida es en serio, por lo tanto tengo derecho a traer niños al mundo cuando crea que es el mejor momento porque los voy a querer a concho.

No me sentí asesina, no me sentí mala, tan solo me setí mal porque era una bomba hormonal.

salud!